Mi historia en el mundo del diseño técnico comenzó con un lápiz en la mano y una hoja en blanco frente a mí. La delineación tradicional fue mi puerta de entrada a este mundo de imaginación, donde cada línea trazada era una pieza de un rompecabezas mayor.
Cada proyecto era un desafío, una oportunidad para perfeccionar mi técnica y agudizar mi visión espacial.
Aprendí a valorar la precisión, la claridad y la importancia de los detalles, cualidades que aún definen mi trabajo hoy en día.
Con el tiempo, la función del diseñador técnico evolucionó, y yo evolucioné con él. El papel y el compás dieron paso a herramientas digitales, que nos invitaron a investigar y evolucionar ampliando los límites de lo que es posible.
La tecnología ha permitido optimizar procesos, explorar nuevas formas de diseño y visualizar proyectos con una claridad que antes solo podíamos imaginar. Esta evolución no solo ha transformado mi forma de trabajar, sino que también ha redefinido el papel del diseñador técnico en la industria
En mi trabajo combino la precisión de la vieja escuela con la innovación de las herramientas modernas. Cada proyecto es una oportunidad para aplicar tanto los fundamentos del diseño técnico como las últimas técnicas y software del mercado. Desde planos detallados hasta modelos tridimensionales, mi objetivo es convertir ideas en realidades tangibles y funcionales.
El diseño técnico es más que líneas y medidas; es la base sobre la cual se construyen los proyectos que dan forma al mundo que nos rodea. Como diseñador técnico, no solo dibujo planos: diseño soluciones, conecto ideas y contribuyo a que los proyectos cobren vida.
Del papel a la realidad, de la idea al proyecto. Hagamos que tu concepto cobre vida.